Nuestro Premio Nobel de literatura 2010, Mario Vargas Llosa, cree que despenalizando el consumo y cultivo de drogas combatiría el narcotráfico y la violencia que existe hoy en día. El escritor sostiene que ya hemos intentado combatirla y eso ha generado pérdidas económicas que no has generado algún resultado positivo y las cifras de violencia a consecuencia de la prohibición aumentan cada vez más.
Yo discrepo totalmente ante su propuesta, pues creo que el porcentaje de violencia, delincuencia, narcotráficos y enfermedades que tienen que ver con este tipo de adicción se incrementarían mucho más aún. Al tener libertad de consumir estupefacientes, las personas, principalmente la juventud se vería tentada a probarla quizás por curiosidad, pero quien garantiza que no sé convertirían en un adicto más de esa interminable cantidad de personas que no logran salir de su vicio.
No considero que legalizar las drogas conociendo los problemas que afronta nuestra población, sea la mejor estrategia o la solución y el fin a todos los problemas que aquejan día tras día a nuestra sociedad.
Al despenalizar el consumo de drogas los resultados serían encontrar y acceder al uso de ellas fácilmente, y ya de por sí, siendo aún ilegal su consumó, CEDRO revelo en una encuesta que los jóvenes universitarios entre hombres y mujeres entre 16 y 22 años, un (70.5%) considera a la marihuana como la droga ilegal más fácil de conseguir, seguida por el éxtasis en un (45.2%), entre otros. Estos datos evidencian que en el entorno académico de estos jóvenes es común y accesible conseguirlas.
No solo los jóvenes serían los más propensos al caer en adicción ¿Se imaginan a los padres? Ellos, quienes son los que deben inculcar valores y ser el ejemplo de su familia, se pongan a consumir drogas en presencia de sus hijos, induciendo a que el niño crezca con la mentalidad de que es algo natural y permisible dentro de la sociedad. El argumento de que cada quien es libre de hacer con su vida lo que desea puede ser cierto, pero no podemos olvidar que la mayoría de adictos empiezan por causar daño y sufrimiento dentro de su familia hasta el punto de acabar con su propia vida.
Legalizar las drogas acarrearían más problemas de lo que se pueden imaginar, incluso considero que hasta la persona más ilustre como MVLL desconoce todos las nuevas consecuencias que surgirían dentro de la población, mucho más adicción, mayores accidentes, crímenes, pandillas que no medirían su violencia por falta de cultura y conciencia, y una infinidad de líos que se agravarían a consecuencia de tanto libertinaje.
¿Sí a la libertad para suicidarse lentamente?
¿Sí a la libertad para suicidarse lentamente?
No a la legalización de las drogas!
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